Como ayer dejamos todo preparado (equipaje, documentación, e incluso un post programado para el lunes por si no me podía conectar) esta mañana hemos salido sin prisas para el aeropuerto donde nos ha tocado esperar, ya que el avión salía con casi una hora de retraso. Eché en falta mi modem 3G para matar el tiempo con algo de conexión; de todas formas la NDS cubrió bien ese vacío. Durante el vuelo me ví una peli en mi reproductor multimedia Cowon D2.
Al llegar al aeropuero de Bruselas tomamos un tren y en apenas 15 minutos estábamos en Leuven (o Lovaina), un ciudad típicamente universitaria del lado flamenco de Bélgica, muy cerquita de Bruselas. Nuestros anfitriones nos fueron a recoger a la estación y nos llevaron a su casa.
Apenas nos instalamos salimos a dar un corto paseo por el centro de Leuven y visitar un poco del mercado de navidad. ¿Lo primero que hicimos? solo una foto:
De regreso a casa dimos buena cuenta del vino que trajimos y de un buen queso belga y disfrutamos de una agradable conversación con estos amigos. Ahora todos se han ido a la cama, no sin antes dejar que conecte mi Asus EEE ("susisto") al acceso a internet que la universidad proporciona a los alumnos (prometo contaros más sobre este tema). Ahora estoy saludando a los amigos en #red-handed, aunque no tardaré en irme a dormir. Mañana toca conocer en profundidad Leuven...
2 comentarios:
Que envidia me das....lo digo por el gofre que llevas en la mano, imagino que ahora le echaras el chocolate.
No sé si te estas librando del frio, pero en Segovia hace un frio siberiano.
Hola mar69, el gofre de la foto ya tenía choclate (por cierto de excelente calidad).
Frío sí que hace pero si me hubiera quedado en Madrid tampoco me hubiera librado.
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